Que la sociedad va cambiando a lo largo de las generaciones y de los siglos, es un hecho innegable. Este cambio se ve reflejado en algunos factores incluyendo el factor humano. Un ejemplo es en los libros de texto de los colegios.
Actualmente existen en las aulas, además de pizarras digitales, libros digitales de texto, que los alumnos ven en los ordenadores portátiles. Como decía antes, la sociedad y las generaciones van cambiando y evolucionando a lo largo del tiempo, y ya que es un hecho que tenemos que aceptar, tenemos que adaptarnos a las necesidades de la época, por ejemplo las nuevas tecnologías.
Algunas de las ventajas de tener en clase libros de texto digitales son: el acercamiento de las nuevas tecnologías a los alumnos, el no tener que ir cargados a clase con tantos libros, que les repercute además en problemas de espalda, la autoevaluación de ejercicios y actividades y el profesor, podrá modificar el libro digital adaptándolo a las necesidades de sus alumnos.
La desventaja fundamental que le veo a estos libros digitales, es que no ejercitan la escritura tanto como con los libros tradicionales.
Los dos formatos, los libros tradicionales y los libros digitales, permiten la interacción profesor-alumno, porque aunque en los digitales hay lecciones explicadas en vídeo, el profesor puede aclarar dudas, proponer actividades y ejercicios, y si le interesa, podrá dar él una explicación a su manera.
En conclusión, podemos incluir los libros digitales en las aulas, de tal manera que también se combinen métodos tradicionales como libros y cuadernos de plástica para ejercitar el dibujo o cuadernos para ejercitar la escritura.
A continuación analizaré los contenidos y otras variables de un libro de texto de otra época y un libro de texto digital actual.
La principal diferencia que encuentro entre estos dos libros, es el tema. En la portada nos podemos encontrar diferencias como el título, actualmente se llama “Educación en valores” y en los años 1902-1931 se llamaba “Nociones de Urbanidad y deberes religiosos y sociales”. La diferencia en los contenidos es visible ya en los títulos. En el libro de 1902-1931, los contenidos de urbanidad estaban dirigidos hacia la religión cristiana, y a los deberes que tenían las personas en la sociedad de aquellos tiempos, especialmente dividían los deberes de las mujeres y de los hombres.
Actualmente, en “Educación en valores”, se trata principalmente la libertad y la responsabilidad en la toma de decisiones, los derechos del niño, el reconocimiento y aprecio de las diferencias de género, la expresión y el control de las emociones, la identificación de rasgos de diversidad cultural y religiosa, principios de convivencia establecidos por la Constitución y hábitos cívicos, etc. Se puede apreciar la diferencia en contenidos.
El libro de 1902-1931 carece de imágenes, al igual que cualquier libro de texto de esa época. Actualmente si existen imágenes en los libros para captar la atención de los niños. También la letra de los libros antiguos es muy pequeña. Ahora es todo lo contrario, y varía según la edad, cuanto menos edad, más grande la letra, adaptándose así a las necesidades de los niños. Antiguamente no se adaptaban a las personas en particular, si no a la sociedad en general.
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